Sobre mí.

Fascinada por la capacidad de las personas para hacer frente a todo tipo de situaciones, dificultades y sufrimientos, me adentré en el mundo de la psicología. Uno de mis objetivos principales siempre ha sido indagar en las cualidades que hacen que unas personas vivan una vida plena y, en cambio, otras se sientan insatisfechas, frustradas o desanimadas ante algunas situaciones.

Normalizar la sensación de “pérdida de control” ante determinadas situaciones y aceptar la “fragilidad” del ser humano es una de las claves que he descubierto para ayudar a las personas que acuden a consulta a recobrar su bienestar emocional. Todos/as hemos tenido alguna vez la sensación de malestar e impotencia ante la incapacidad de cambiar algo que nos estaba haciendo sentir mal, pese a haberlo intentado todo. Es en ese momento cuando buscar apoyo psicológico puede otorgarnos una nueva perspectiva ante el problema y nuevas herramientas para hacer frente a la situación que genera malestar y de este modo recuperar el equilibrio emocional.

Con el fin de mejorar el estado de salud mental de las personas, tras finalizar mis estudios universitarios obtuve la habilitación sanitaria, que me permitiría realizar evaluaciones e intervenciones psicológicas a nivel comportamental, de trastornos como la depresión o la ansiedad.